martes, 30 de marzo de 2010

Fiódor Dostoyevski - Crimen y castigo

Dentro de mis cúmulos de pensamientos y sensaciones, la dualidad de ellos me aplasta. Esa lucha entre uno y otro. La necesidad de mantenerse en medio, observador, espejo de la realidad. Por eso siempre me ha gustado Crimen y castigo, disfrutar del ascenso y caída (¿o será al revés?) de Raskolnikov. Lectura obligada en secundaria, volví a leer a Dostoyevski hasta la universidad. Y ahora de nuevo. Y aunque su lenguaje es algo anacrónico, cada ves que repito esta lectura, la angustia me invade, de una manera que redime.



2 comentarios:

Javier Almaraz dijo...

Un verdadero clásico. Yo diría. Gracias Miss Bertha.

Alvaro dijo...

Si, también el reconocimiento a la Miss Bertha. Uyy, un clásico también la Miss Bertha!